viernes, 23 de julio de 2010

Que tontería...





Dije que me rendí, verdad? Pues parece que no es tan fácil. Han pasado meses y el recuerdo se esta haciendo cada vez más intenso en mi cabeza. Tengo la sensación de que me lo voy a encontrar en cualquier momento... sueño con que reaparezca en mi vida diciéndome que no me olvida, que me quiere... y lo demás no importa. El tiene su vida y su familia... por experiencia se que eso no va a pasar, solo en las películas de final feliz... Por qué si debería odiarle no tengo en mi cabeza más que buenos recuerdos y elogios para el? existe alguna cura para esta enfermedad? Y, si tuviera un antídoto me gustaría tomarlo y dejar de sentir esto? Os confieso que me encanta dedicarle un tiempo todos los días a pensar en el. Que tontería, verdad?

2 comentarios:

  1. este blog es muy bueno, me siento muy identificada, ánimo te sigo en twitter! escribe más a menudo!! se lo recomendé a mis amigas

    ResponderEliminar
  2. Buenas guapa!
    Qué pena que hayas dejado de escribir porque justo ahora yo me encuentro en esa situación y me ha chafado un poco no saber el final. Me ha encantado tu blog..con lo que valemos y que poco nos valoran eh? Sinceramente creo que somos unas retorcidas. Cómo si no, nos meteríamos en estos saraos? Los de nuestra generación están domados, acostumbrados a reconocer nuestra brillantez, su inferioridad, nos necesitan y lo saben. Sin embargo estos cabr**** de más de 40 nos toman por tontas y el afán de reeducarlos nos acaba sumergiendo en un mar de dolor, solo para encontrar que son irreeducables. Ánimo con las otras facetas que completan tu vida, que son fantásticas. muuuac!

    ResponderEliminar